sábado, 29 de marzo de 2008

viernes, 28 de marzo de 2008

Die Mädchen mit den verbundenen Augen (II)

porque nací con los ojos
bordados
de claro
haberme visto partir

camino a la costa
con las piernas.

conozco la humedad
y la fragancia.

Orilla

No soy la ola
apenas la rompiente
donde tu espuma se dispersa,
es otra espuma.

jueves, 27 de marzo de 2008

(sin título)

hay un tiempo trasfebrero
(febril abanícate).
es el agua
contra el fuego trasfebrero,
rompe contra el fuego.

te añoro con los pies en las arenas.

extraño tú.

solide(air)

celui aux yeux foncés, au sourire,
à la main volante.
(il) a la main vide.
celui à la petite poitrine,
l'homme
près de moi par terre.
tiens, près de moi
(par coeur).
l'eau en haut,
toi en bas.

vois-la, regarde

Voici l'heure qui vient t'arrêter, Nahandove...

voilà le faim, la femme. il n'ya rien à dire, faudrait-il pourtant...
voici l'homme qui vient t'arrêter. j'espère, j'attends.
voici laure, jésus, françois. toujours la première fois, la foie. j'espère, j'attends.

vela por fe primera.

peau d'âne

Las flores no tienen pétalos más que alrededor de las nucas de las princesas y las hadas. En la vida los pierden, los pierden como la gente los dientes y el pelo. Las princesas no porque mueren antes de eso. Y las hadas no existen.

ese pelo falso rubio es el terror

De vez en cuando vuelven a volar los pétalos aún maduros, los que aún no debían caerse y volar. Son rojos o pardos, tiene cada uno una raíz que abandona.
Oigo las voces de aquéllas que creen vivir; las oigo revolotear, reírse amargas y solas aun ilusas. Nos son ingenuas, las voces: son ásperas hormigas invasoras.
Una puerta se abre y se cierra tras de sí. Es la casa de la bruja en el entrecejo fruncido del niño y después en su almohada y también tal vez después. El sabor inconfundible del pasado, abrasador tiempo de la casa sola, ya sin nosotros allí viviendo. Una bisagra se confunde con el miedo a morir solos, ese pelo falso rubio es el terror.

durante

Así estuvimos reunidos antes de la fiesta y sin saber siquiera de la fiesta. Mientras llegabas y te veíamos llegar, recuerdo los cristales esparcidos, el mantel, un murmullo que algo tenía que ver conmigo. Mientras llegabas y te ví llegar, me estreché una mano con la otra y acaricié mis propios dedos con ansia, oí una risa sin más (una risa), y supe que mis ojos querían ser más redondos, más grandes y más verdes. Mis pechos se conformaron, el anillo giró en el dedo, aparté mi pelo y lo hice caer sobre el hombro desnudo que te llamaba ahogado, henchido de placer por la caricia. Mientras llegabas alguien se cayó y sentimos vegüenza todos, pero entonces sólo tú llegaste y yo no estaba allí. Mientras tú llegabas, yo florecía para mí, para mí.

Die Mädchen mit den verbundenen Augen (I)

La niña con cara de extraterrestre hereda de la lluvia las flores de sus zapatos. Tiene flores en lugar de ojos, una flor en lugar de boca. Por eso no habla ni ve y parece golpeada, llena de huecos. La niña con cara de extraterrestre tampoco tiene manos. Y a su lado hay una mancha que hice yo (también).
Pero la gota que cae en su pelo revienta en su pelo en forma de otra flor azul.
Die Mädchen mit den verbundenen Augen.

...

en la calle pasan cosas que yo no sé, porque tengo un mundo pequeño.

pequeño mundo es tan mi, que tengo un blog que nadie lee. en yo pasan cosas que la calle no sabe.

Ni principio ni fin

Ni luz
de oscuridad
tan sólo ausencia,
insospechada amante
en despedida,
traición de mí
que dije Hasta mañana
confiada
al hilo de tu voz
-ese sigilo
sin final
cortado en aire-.
A tu perfil yacente
lo dije
-susurro casi
sobre la amohada
en sombras-
a tu miedo en la noche,
a tu cuerpo arrojado
de la espina dorsal,
al sueño entre desvelos,
a mi nombre en pedazos,
entredientes,
entredicho tal vez
contra el vacío
hasta el amanecer.
Falsa promesa
que te negó de mí
y de la luz
de la mañana
que no fue
ni será.
Como si nunca antes.

¿y la nueva entrada?

Soplo

Aunque te busque
en plena noche
con las velas
en alto
-caverna de pabilos-
aunque encienda la casa
con fósforos,
con linternas,
con lámparas,
no es hora
de relámpago
sino
de oscuro soplo
en la vigilia
de mis huesos.

lunes, 3 de marzo de 2008

la puta batería nos

trunca las charlas.
tiempo y tiempo hacía que no, si es que alguna vez pasó esto conmigo. un encanto y el encantamiento.
él es hoy el anfitrión y el huésped insospechado, mis ausencias y presencias en fruto carnoso resultante. tengo el cuerpo y el alma una vez más y por primera vez, por un instante, en la morada.